"Amar a nuestros enemigos"

Entrevista al comunicador Jesús Colina
ANNA KARINA ROSALES
03-03-2009 www.informarn.nl
Si el Cristianismo y el Islam deben desempeñar un papel importante en la promoción de una cultura de paz, lo mismo deben hacer los medios de comunicación. De eso está convencido Jesús Colina, director de la agencia católica de noticias Zenit y promotor de la iniciativa H2O de comunicación católica a través de Internet.

Colina estuvo presente en el reciente encuentro en Roma entre el Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso y la Universidad Al-Azhar de El Cairo. El comunicador considera la reunión, presidida por el cardenal Jean Louis Tauran y el secretario general de la Academia de Investigación Islámica de Al Azhar, el jeque Ali Abd al baqi Shahata, como un nuevo punto de partida para mejorar las relaciones entre las dos religiones.
"Ha sido un acontecimiento histórico por dos motivos: Primero, porque la universidad Al Azhar de El Cairo es la autoridad académica y también espiritual más importante que existe en el mundo islámico, y en segundo lugar, porque este encuentro tiene lugar casi dos años después de la famosa intervención de Benedicto XVI en Bratisbona, en la que se había creado un malentendido con el mundo islámico", explica Colina.
Cabe recordar que el Papa Benedicto, durante una cátedra en la Universidad de Bratisbona , citó a un emperador bizantino del siglo XVI, Manuel II el Paleólogo, quien en otras palabras indicaba que el Islam era violento. Esta cita causó en su momento revuelo mundial y fue visto, por unos, como una torpeza del sumo pontífice, y por otros como una provocación al mundo islámico.
"Este encuentro era muy esperado", dice Colina. "La conclusión fundamental fue que aquella gran crisis provocada por tales declaraciones, se ha convertido en una oportunidad para el diálogo interreligioso".

Conclusiones
Entre las conclusiones del encuentro en Roma, las delegaciones de ambas religiones manifestaron estar de acuerdo en que la paz es extremadamente necesaria en el mundo actual, y que ésta no podrá alcanzarse sin justicia e igualdad entre las personas y comunidades.
En otra de las conclusiones se mencionó también el papel de los medios de comunicación en la promoción del diálogo interreligioso, y su responsabilidad en las relaciones positivas y respetuosas entre los fieles de varias religiones. Colina está muy de acuerdo con esta conclusión: "Si hoy estamos convencidos de que el riesgo es el choque de civilizaciones, y que los medios tienen un papel fundamental para evitar este riesgo, entonces nos damos cuenta de que nos encontramos ante un tema primario."
Para el comunicador, los medios pueden convertirse tanto en agentes de paz como de guerra. "Pueden convertirse en aquellos puentes que unen a creyentes de diferentes religiones, o barreras que los separan," indica. "De allí la importancia de que el mundo musulmán y el mundo católico, hoy más que nunca, valoren la necesidad de trabajar con los medios, de saber dialogar con ellos, para transmitir bien el mensaje."

Proyecto H2O
Colina forma parte del comité editorial de Zenit y es también corresponsal para varias agencias de comunicación religiosas, y ya no sólo hace radio o prensa, sino que incursiona en la web a través del proyecto H20.
"Se trata de una nueva iniciativa que surge en el seno dela Iglesia Católica con el apoyo del Consejo para las Comunicaciones Sociales, que es el órgano del Vaticano para estas iniciativas. Se busca entrar en lo que hasta ahora parecía un terreno en el que los católicos están un poco ausentes: el de la televisión y el video" indica Colina.
Entre las obras que promueven, la más importante es la del lanzamiento en youtube del canal del Vaticano."El Vaticano prepara los videos y nosotros los traducimos en nueve idiomas, y eso permite una distribución única," señala.
H2O distribuye también noticias del Vaticano y de otras agencias católicas, entre las pequeñas o grandes televisiones católicas en los diferentes países del mundo. "Es una nueva frontera que se presenta para los creyentes, para poder comunicar aquello en lo que creemos con las nuevas tecnologías".
Colina concluye con una reflexión sobre el papel de los comunicadores en la búsqueda de la paz: "No es la profesionalidad lo que hace la diferencia entre un comunicador cristiano y uno que no lo es, porque todos deberíamos ser igualmente profesionales. No es la técnica, ni la ética, porque todos estamos llamados a respetar sus principios básicos. Nosotros, como comunicadores debemos amar al enemigo, tenemos que nunca atacar a las personas, siempre respetarlas".